KAWSAK SACHA-SELVA VIVIENTE: PERSPECTIVAS RUNA SOBRE CONSERVACIÓN
DOI:
https://doi.org/10.21680/2238-6009.2019v1n53ID20911Resumo
Este artículo tiene como objetivo describir y analizar en qué consiste la categoría de “conservación” del territorio del Pueblo Originario Kichwa de Sarayaku, ubicado en la Amazonía ecuatoriana, partiendo de su propuesta denominada Selva Viviente o Kawsak Sacha (en kichwa) y prácticas cotidianas, como la pesca. Aunque esta propuesta haya sido trabajada hace más de diez años, desde 2012 Sarayaku empieza a visibilizarla como parte del esfuerzo por hacer efectivos los derechos de la naturaleza y de los pueblos originarios, previstos en la constitución ecuatoriana de 2008. En julio de 2018, cuando se realizó el evento ofi cial de lanzamiento de la propuesta en Quito, Sarayaku declaró su territorio como área de protección libre de explotación extractiva, petrolera, minera, maderera, así como de mecanismos de conservación asociados al mercado (como sería el REDD+). Sarayaku enfatizó que esta es una demanda por el reconocimiento jurídico-político de la existencia de otros seres – espíritus, árboles, cascadas, Pachamama o Allpamama, etc. – como vivos y conscientes, al igual que los humanos, a parte de una nueva categoría de conservación de territorios indígenas, ya que la constitución de 2008 y la titulación de su territorio (alcanzada en 1992) no garantiza el mantenimiento de sus prácticas de vida, derechos y tampoco la autonomía en definir lo que es, cómo cuidar e interactuar en/con su territorio. Esta propuesta forma parte de una larga trayectoria, protagonizada por Sarayaku, de lucha y resistencia anti-extractiva, sobre todo petrolera, además de un nuevo marco en la elaboración de conceptos y propuestas (cosmo)políticas que este pueblo ha históricamente presentado al Estado y a las organizaciones internacionales (Naciones Unidas, coaliciones de la sociedad civil, etc.) como un paso más allá de la resistencia “en contra”. Si de hecho esta es una traducción al mundo de los no indígenas de conceptos y prácticas concretas de vida de Sarayaku, es también verdad que es más que solamente tácticas o estrategias para el enfrentamiento de la explotación y aniquilación que proviene de los mundos no-indígenas. Constituye, en fin, un modo de vida, una forma de hacer mundo, de resistir co-existiendo.